Bocanada
Estuvimos todo el día en la niebla; los arboles, nosotros, las
calles, la ciudad entera en penumbras. Teníamos unos ojos de
niebla, flotando entre las ramas desnudas; estábamos solos, sin
compañero de asiento, compañera de cama, de trabajo, allí
estamos
estamos
solos sin otro pensamiento que la neblina, gris, tierra
flotante, edificación de nubes en la garganta.
Anocheció sin que lo supiésemos. El cigarrillo se extinguió,
borró más el paisaje.
Anocheció sin que lo supiésemos. El cigarrillo se extinguió,
borró más el paisaje.
Nuestros cuerpos eran un vapor cálido en la niebla nocturna,
hasta que vino el alba y dividió los rayos que disipan las
formas.
formas.
Beatriz Osornio Morales.
NoTA:Anduve ocupada la semana pasada, disfrutando de unos visitantes canadienses, viviendo y dando vida.
Con todo y lo bien que lo he pasado, estoy feliz de volver.
Feliz semana a todos y todas.